El amor tiene esas locuras, porque cuando se ama se hacen cosas que no se entienden, y menos aquellos que son ajenos a esta actitud de amar. Jesús estaba presto a amar, que no es otra cosa que hacer el bien y vivir en la verdad y la justicia.

Por eso, los que no están dispuesto ni abiertos a hacer el bien – a amar – les parece de loco aquellos que lo hacen. Y es que cuando se ama, no se piensa en uno mismo sino en el bien del otro. Todo lo contrario que quien se tiene primero y pone en segundo plano al otro.

Jesús anuncia la Buena Noticia de Salvación con su Vida. Su estilo de vida fue una constante en hacer el bien y en enseñar en verdad y justicia. Una manera nueva de enseñar, porque lo hace con palabras y vida hasta el extremo de dar su propia vida por la salvación de los demás. ¡Bendita locura!