Supongo, y los hechos lo avalan, que muchos cuando buscan, en realidad no buscan sino que se buscan. Es decir, tratan de encontrar respuestas que les respondan a sus propios interrogantes. No quieren respuestas a la verdad, sino respuesta a la verdad que ellos quieren.

Y, claro, se eliges un camino equivocado nunca encontrarás el Camino correcto y verdadero ni tampoco tu camino. Porque, el camino que tú buscas es un camino apoyado en arenas movedizas, de mentiras y falsedades. Un camino de este mundo y en este mundo no está el auténtico y verdadero Camino.

El Camino que realmente buscas, aunque no lo sepas ni lo hayas descubierto, es el Camino de la Cruz. La Cruz es el Signo de Salvación que, valga la redundancia, nos salva. En ella murió Jesús, y muerto, Resucitó al tercer día. Y nos ha prometido que los que creen en Él también resucitarán.