Se hace necesario distinguir lo fundamental y lo
accesorio. Mientras lo valioso es imprescindible para el camino que la vida nos
presenta, lo accesorio, siendo necesario, no cuestiona ni erosiona nuestra vida
si conservamos lo verdaderamente valioso.
Libérame, Señor, de todas esas seducciones que me
propone este mundo. Limpia mi corazón de toda tentación de la carne y despójalo
de todo aquello que le impide verte, estar contigo y cumplir tu Voluntad. Señor,
que el mundo, demonio y carne no me aparten de Ti. Amén.
La vida, si la analizamos bien, advertimos que la vivimos, exclusivamente, de dos maneras: escucha y servicio. Escuchamos primero para saber qué hacer. Y, tras la escucha, pasamos a la acción. Es decir, pasamos gran parte de nuestra vida en estas dos actitudes: escuchar y servir. Es evidente que, haciéndolas bien, hemos aprovechado bien nuestro tiempo de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.