Por lo tanto, hay que buscarlo en otro lugar o en alguien que nos lo descubra y sea capaz de generarlo hasta la plenitud eterna. ¿Dónde está ese mensaje? Sólo una Persona, Jesús de Nazaret, enviado por su Padre, se ha hecho portavoz de su Palabra y nos ha revelado ese Amor.

Sólo esa Persona, venciendo a la muerte, ha Resucitado por el Amor del Padre, pagando así todos nuestros pecados y, por su Mérito, alcanzar la Misericordia del Padre y la dignidad de hijos. Pero, para eso, se ha hecho Hombre y despojándose de su Dignidad Divina ha entregado su Vida por nuestro rescate.

Luego, descubres y experimentas, cuando lo conoces, que en Él está el verdadero Amor que buscas. Un Amor que da nueva vida y que salta hasta la Vida Eterna. Realmente ese es el Verdadero y Único Amor que interesa buscar, porque satisface plenamente.