Tienes
una llamada desde el día que tus ojos se abrieron a la luz del sol de este
mundo. Una llamada que te ha acompañado en todo tu camino y desarrollo de tu
vida. Pero, quizás tú no hayas advertido que, esa llamada, es lo más importante
de tu vida. ¡Respóndela!
Quiero
y deseo. Señor, dejar tu huella de amor, misericordia y bondad en todos
aquellos que se acerquen a mí. Por eso, te pido con todas mis fuerzas que me
revistas de tu Bondad para que mi vida, en todos sus actos, te refleje
vivamente. Amen.
Darte cuenta de que todo lo que este mundo te ofrece es basura con lo que Dios te propone y te concede. En Amarte a ti mismo no encontrarás esa felicidad que buscas. Está en el amor, pero en esa clase de amor gratuito y dado si esperar nada a cambio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.