viernes, 10 de mayo de 2024

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

Es verdad, cuesta seguir adelante si realmente ponemos nuestros ojos en el mundo. Nos seduce, nos gusta y nos atrae, pero es caduco y sabemos que también todo termina. Luego, ¿de qué nos vale ganar este mundo si al final todo se pierde?

No hay mayor consuelo y esperanza que descubrir que Jesús está conmigo a cada instante de mi vida y en todo momento. Incluso en los lugares donde nadie puede estar conmigo, Él llega, me conforta, me consuela, me llena de esperanza y alegría. Y levanto el vuelo y sigo sus pasos.

Quizás será mejor seguir y creer en lo que nos dice Jesús, porque es el final lo que verdaderamente importa. De nada vale vivir unos años, en el mejor de los casos no más de noventa, y no en plenitud de felicidad si al final perdemos la felicidad plena en la Gloria de nuestro Padre Dios para la eternidad. Mejor creer y fiarnos de su Palabra y seguir sus mandatos. Porque eso sí nos llevará a lo que buscamos: plenitud de felicidad eterna. Amén.

No hay mal que cien años dure. Nuestra vida tiene un recorrido y si lo hacemos con amor y misericordia, a pesar de las tristezas y llanto que el camino de amor nos produce, reiremos al final que es lo que verdaderamente importa. Y será una alegría y gozo eterno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.