Dios nos ama, y nos ama en la Persona del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Y es el Hijo quien viene a decírnoslo,
nos anuncia el Amor Misericordioso del Padre, y da su Vida para que lo creamos,
y, más tarde nos envía al Espíritu Santo.
Sigo en el camino y, gracias a Ti, Espíritu
Divino, me sostengo en la fe y en la perseverancia. Y, por la Gracia de nuestro
Señor Jesús, y abierto a tu acción, voy sosteniéndome en la fe y entendiendo
todo lo que me revelas en la Palabra de Dios. Por eso, trato cada día de
llamarte y abrirme a tu acción. Gracias, Espíritu Santo.
Quien se encargará de recordarnos todo lo que el Hijo nos ha enseñado en el tiempo que ha estado con nosotros, y nos ira recordando y revelando todo lo que tenemos que conocer y recordar para recorrer el camino de salvación que Jesús, el Hijo, nuestro Señor, nos ha dejado como tarea para dar a conocer el Amor Misericordioso del Padre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.