martes, 10 de junio de 2025

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

Estamos llamados a ser sal y luz, pero no lo conseguiremos actuando por nuestra cuenta, sino abiertos a la acción del Espíritu Santo. Eso sí, de acuerdo con nuestros talentos y cualidades, pues no podremos dar dino lo que nos ha sido dado.

María, primera discípula, y Madre del Señor. Tú que hiciste el camino acompañándole y aceptando el dolor que compartiste con Él, siendo corredentora junto a tu Hijo, danos fortaleza ante el dolor y esperanza para hacer junto y como Tú, el recorrido en tu Hijo Jesús Resucitado hasta el pie de nuestra propia cruz.

Se trata de aceptar y aceptarnos tal y como Dios, nuestro Padre, nos ha pensado y creado. Y desde ahí, humildemente, aceptar nuestra condición humana con uno, dos o tres talentos recibido. Cada cual tendrá su misión y objetivo dependiendo de lo recibido. Es evidente que quien más sal y luz haya recibido, más ha de aportar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.