miércoles, 17 de diciembre de 2025

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

De alguna manera, Jesús nos muestra que es uno de nosotros. Tiene su origen humano, su pasado y su historia. No está exento de antepasados de honores, pero también de mezquindad y pecado.

Señor, me desespero con facilidad. Y vienen a mi mente quejas, insultos, culpables. Dame, Dios mío, la paciencia que necesito para calmar mi alma y derramar amor y misericordia en lugar de agravios y ofensas.

Jesús asume todo nuestro pasado sin despreciar su fragilidad ni descartar su miseria; nos ofrece la confianza segura de que en Él todo será salvado y consumado.

El arco de la promesa abierto en Abrahán, hijo querido de Yahvé, alcanza su culminación en Jesús, el predilecto del Padre.

Nuestro pasado no es un obstáculo para Dios, sino el lugar donde Él comienza a salvarnos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.