Posiblemente, pedimos por nuestros problemas y necesidades, pero, lo que debemos pedir es que se haga en nosotros la Voluntad de Dios. Porque, la Voluntad de Dios siempre será lo mejor para nuestro bien y el de todos los que nos rodean.
También, tendremos que reconocer, que nos falta fe y que, a pesar de eso, tendremos que, humildemente, insistir, ser pacientes y perseverantes sobreponiéndonos al desfallecimiento, las desgana, desconfianza y abandono.
Y, pedir insistentemente que nuestra fe aumente. Pedirla sin impaciencia, sin prisas, pero, sin pausa y con esperanza y confianza sabiendo que Dios Padre nos escucha, nos atiende y nos responde. Somos sus hijos, creados por amor y no nos dejará abandonados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.