martes, 18 de febrero de 2014

LA NOCHE, UN BUEN MOMENTO PARA PENSAR

Somos hijos adoptivos de Dios, y como hijos nos cuida como un Padre. Por lo tanto, nuestra vida se sostiene en Él y todo lo que nos sucede pasa por Él. Por eso, el Señor es mi Pastor y nada me falta. Sin embargo, experimento enfermedad, deterioro y hasta muerte. ¿Qué ocurre entonces?

Nuestro Padre Dios nos ha creado, pero por el pecado somos imperfecto, más Dios nos ha salvado en su Hijo Jesús, pero tenemos que seguir nuestro camino, y en el camino maduramos nuestra salvación, pero empeoran nuestras facultades físicas puesto que es un camino de perfección. 

Así vamos deteriorándonos en lo material, pero perfeccionando lo espiritual hasta alcanzar la plenitud en el amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.