Cada situación merece un tratamiento diferente, pero siempre
será bueno dar buen destino a todo lo ganado, aún injustamente, para que cuando
vengan malos tiempos tener amigos que nos puedan ayudar a salir del atolladero.
De cualquier forma, quien se muestra justo y honrado en lo pequeño, también lo
será en lo grande.
La dificultad nace cuando queremos arreglarnos y convivir
con la riqueza y el poder y con Dios. Uno de los dos quedará abandonado,
porque, o bien servimos al dinero, que nos tienta y seduce con el poder y la
ambición de este mundo, o, alejado de toda seducción servimos al Señor. Sólo
prevalecerá una.
Sabia decisión de la
que dependerá nuestra vida. Porque, de quedarnos sometidos a la seducción del
dinero, habremos optado por la peor parte, pues será camino de perdición y
muerte. La mejor y única será optar por servir al único Dios Eterno que también
nos dará la Vida Eterna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.