Conviene al hombre tener de donde surtirse de buenos
consejos y orientaciones que le ayuden a encontrar el mejor camino para su
vida. Un camino que le permita crecer y realizarse como persona. Realizarse y
madurar en el bien, la justicia, la verdad y el amor.
Jesús, el Señor, nos deja hoy en el Evangelios una invitación
donde se ofrece como nuestro Mentor. Un Mentor que nos garantiza nuestros
frutos y que nos invita a permanecer unidos a Él. Y nos revela que sin Él nada
podemos hacer. Nos habla muy claramente.
Lo mismo que el sarmiento no puede dar fruto por sí
mismo, si no permanece en la vid; así tampoco vosotros si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ése
da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.