jueves, 12 de noviembre de 2020

 

Es ahora, y no antes o después la hora del Reino. Dios se hace presente en tu corazón y te acompaña desde la hora de tu nacimiento a la vida. Es ahora el momento, y no mañana. Por eso, en la hora de nuestro bautismo hemos recibido al Espíritu Santo para que nos auxilie.

Y, desde ese mismo momento, El Espíritu Santo nos acompaña en nuestro quehacer y vivir diario, asistiéndonos, iluminándonos y dándonos fortaleza para, no solo anunciar su Reino, sino para dar también testimonio de que está presente en el acontecer de cada día.

Por tanto, no esperemos acontecimientos espectaculares ni extraordinarios. El Reino está presente en la normalidad y sencillez de la vida. Es ahí, donde tú y yo vivimos y estamos en relación con los demás, donde tenemos que anunciar con nuestro vivir y obrar que el Reino ha llegado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.