domingo, 1 de agosto de 2021

 

 

Esta naturalidad implícita en la propia naturaleza del ser humano muestra que tras nuestro seguimiento hay siempre un interés, muchas veces escondido. Jesús descubre esas intenciones que anidan en nuestros corazones. Le seguimos buscando el beneficio material.

Jesús nos advierte que solo el Pan que Él nos da nos dará Vida Eterna. Sabemos por propia experiencia que necesitamos el pan material, pero, de nada nos servirá ese pan que nos da el sostén en este mundo si perdemos el verdadero Alimento que nos da la Vida Eterna.

Y, nuestro objetivo primero debe ser buscar ese Pan espiritual – Cuerpo y Sangre de Cristo – que nos dé ese Alimento espiritual que nos fortalezca, que nos dé la Gracia de ir, poco a poco, transformando nuestros endurecidos corazones en unos corazones de Vida Eterna

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.