sábado, 14 de marzo de 2015



La carrera de nuestra vida tuvo un principio, pero ese principio nos descubre también un final. Sería de tonto e incoherente no reflexionar sobre él. Porque tarde o temprano se presentará delante de nosotros.

Hoy, ese principio incluso está en peligro. Precisamente se ha celebrado una marcha en protesta y con la intención de llamar a reflexionar sobre ello. La vida importa mucho, pero también nos importa el final. ¿Qué ocurrirá después?

Dios no mandó a su Hijo al mundo para juzgarlo, sino para que el mundo se salve por Él. Sería entonces muy importante fijarse en Él y escucharle.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.