Hoy, Pedro y Juan descubren que Jesús no hablaba de broma.
Empiezan a entender que significaba aquello de edificar el templo en tres días.
Y lo de resucitar al tercer día. Los interrogantes empiezan a encajar y todo
parece un sueño.
De momento, lo que descubren asombrados y gozosos es que
Jesús Vive. ¡Ha resucitado! Y eso cambia sus vidas. Sus testimonios nos lo
dicen. Lo dan todo hasta sus vidas de este mundo para ganar la verdadera vida,
la Eterna.
Y nosotros creemos
apoyados en sus testimonios. Ellos han visto a Jesús Resucitado, y han
comprobado que el sepulcro estaba vacío. Se ha cumplido lo que Jesús les dijo,
y nosotros también creemos en lo que ellos han visto. Ese es el fundamento de
nuestra fe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.