Su familia procede de la extirpe de David y, según los profetas, es de ahí de donde nacerá el Mesías, el Hijo de David. Su genealogía no dan lugar a duda y su historia está contrastada y demostrada. Hablamos de un Mesías humano, encarnado en Naturaleza humana, aunque mantiene la Divina.
Y viene, como hombre, para acercarse a ti y señalarte el camino que tú, que también eres hombre, puedes, como Él, recorrer para llegar a la Casa del Padre que Él te presenta y te anuncia como un Padre Misericordioso. Y se presenta sin privilegios ni superioridad. Simplemente, humilde y servidor.
Es uno más del pueblo y como del pueblo, no es aceptado ni reconocido como el Mesías esperado y enviado. Se le rechaza y, teniéndolo tan cerca no lo ven ni le aceptan. Ellos esperaban a un Mesías Rey y poderoso. Un Mesías capaz de acabar con la dominación romana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.