SOBRE LAS PERSECUCIONES

De siempre hemos conocido que el bien es perseguido por el mal. Aquel que vive en la mentira ahoga la verdad para poder subsistir sin miedo a ser desenmascarado. Por eso estará pendiente de destruir la verdad y perseguirla hasta la muerte.

Jesús proclama la Verdad. La Verdad del Amor del Padre que lo envía para salvarnos de la mentira que destruye y siembra muerte. Y eso distingue a sus seguidores de todos los demás, porque el sello del cristiano es la persecución.

Pues no serán menos que su Maestro y, como Él, serán perseguidos a muerte. Más siempre tendrán la esperanza de Resucitar en y como Él.