sábado, 17 de enero de 2015



Se dice que todo aquel que busca encuentra. Ese refrán tiene mucho de verdad, pues es de sentido común que el que advierte la necesidad de algo, se afana en buscarlo. Es lógico que los enfermos busquen a los médicos.

Pero no todos los médicos sirven para curar la enfermedad de la desesperanza y evitar la muerte. Pueden aliviar y hasta curar temporalmente la muerte del cuerpo, pero no pueden evitar la muerte definitiva. Y menos la del alma.

Sólo el Señor puede hacerlo. Y ha venido para salvarnos para siempre, pero depende de que tú quieras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.