La
fe cristiana no es una fe individualista sino comunitaria, pues el hombre ha
sido creado para amar. Y el amor es la consecuencia de la fe en Cristo Jesús,
porque, Él se ha hecho hombre para enseñarnos a amar y dándonos ejemplo con su
Vida y su Palabra.
Juan
tuvo esa misión que cumplió durante su vida. Fue el elegido para preparar el
camino del Señor y lo anunció con todas sus fuerzas descubriéndonos que estaba
entre nosotros. El Reino de Dios, refiriéndose a Jesús, está entre nosotros.
Porque, Jesús es el Reino de Dios.
Él
es el Amor del Padre entre nosotros. Él nos enseña a cambiar nuestro egoísmo
por amor. Donde hay mentira poner verdad; donde hay injusticia, poner justicia;
donde hay odio y venganza, poner amor y paz. Él ha venido a transformar
nuestros corazones si nos dejamos, porque nos ha creado libres para dejarnos o
no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.