Hay momentos que
el agobio y la acumulación de gente te exasperas y te conmueve. Ante tales
estampas tu compromiso te exige atenderles, pero, también necesitas descansar
porque no eres un superhéroe.
El trabajador necesita también un descanso. La necesidad de
compartir exige también saber qué y cómo compartir. Porque, hay muchos que
aprovechan esas circunstancias para su propio interés sin pensar en los demás.
Y la idea evangélica no es hacer negocio ni buscar
privilegios. Se trata de dar y compartir lo necesario; lo que se tiene y
hacerlo gratuitamente. Porque, gratis lo hemos recibido, y gratis debemos de
darlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.