El Reino de Dios
está presente y camina con tu propia vida. Quizás suceda que tú no lo veas o no
quieras verlo, pero está. Jesús lo anuncia de forma admirable con parábolas que
están al alcance de todos. Simplemente se necesita escuchar y atender.
Cada día es una
batalla que solo puedo ganar, Señor, si voy contigo. Por eso, al iniciar el día
te pido paz, sabiduría y fortaleza para ver el mundo con ojos de amor y tener
la paciencia de soportar todos los contratiempos que van surgiendo. Amén.
Tú decidirás que dirección tomar. El anuncio del Reino de Dios Jesús lo deja muy claro presentándolo con parábolas que reflejan las situaciones y circunstancias que se suceden en la vida ordinaria de cada día. Luego, te tocará a ti decidir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.