miércoles, 26 de abril de 2023

PENSAMIENTOS EN EL CALOR DE LA NOCHE

Irremediablemente cuando reflejamos el amor y la misericordia que recibimos y se nos da gratuitamente de nuestro Padre Dios, nos convertimos en sal y luz para nuestro ambientes y lugares particulares donde en cada instante se desarrolla nuestra vida.

Quiero, Señor, vivir en tu Voluntad, pero sé que soy débil y solo con mis fuerzas me será imposible. Dame paz, paciencia, sabiduría y fortaleza para soportar la adversidad y los obstáculos que tratarán de impedirme que haga y viva en tu Voluntad. Amén.

En lo más profundo de nuestro corazón se esconde un deseo de ser sal y luz para este mundo donde, por ahora, vivimos. Y digo por ahora porque nuestra meta no se queda aquí, estamos llamado a otro mundo donde la muerte está vencida y la eternidad prevalece. Por eso, aunque no lo percibamos con claridad deseamos amar, dar sabor, alegría y paz a la vida y ser capaces de perdonarnos. En el fondo de nuestro corazón hay reminiscencias de sal y luz.

No se nos ha ocurrido pensar que gracias a la oración de muchos, monjes y monjas, como nos dice el Papa, el mundo se sostiene, a pesar de su decadencia, en un equilibrio donde Dios está presente. Y, en y por la presencia de Dios, la salvación está cerca y en nuestras manos gracias a la Infinita Misericordia de nuestro Padre Dios que nos perdona y nos libera de la esclavitud del pecado.

Hay momentos que, al menos yo, me sorprendo por el equilibrio en el que el mundo se sostiene. Un mundo que le da la espalda a Dios y en donde parece que lo que importa es el éxito, la fama, la riqueza y el poder. Dios ocupa un lugar secundario, sobre todo en los estamentos de poder y eso se nota mucho en el mundo que habitamos.

Sin embargo, el mundo guarda su equilibrio y Dios, a pesar de ser rechazado en muchos lugares está siempre presente. Igual que sucedió con Jesús en su tiempo, hoy, a pesar del rechazo, nuestro Padre Dios sigue actuando en el mundo. Y la oración, como nos dice el Papa hoy, de muchos monjes y monjas es la consecuencia de ese equilibrio. Demos gracia a Dios y nos añadimos a esa oración. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.