Lo sabemos, seguir
a Jesús es dificilísimo, mejor, imposible si pretendemos hacerlo por nosotros según
nuestras ideas y sin su asistencia. Para eso ha venido el Espíritu Santo, para
fortalecernos en el Espíritu del Señor y asistirnos en nuestro camino hacia la
Casa del Padre.
Señor, ¿a dónde
voy si no te llevo conmigo? Estaría perdido, sin rumbo, desorientado y a merced
del mundo, demonio y carne. Quiero caminar contigo a mi lado y sabiendo que mi
vida y la de mi familia está en tus manos. En Ti, mi Señor, pongo toda mi
confianza.
La noche es
momento donde el silencio te invita a mirar tu interior y ver lo bueno que has
hecho durante el día y lo malo que tu propio egoísmo te ha privado de hacer el
bien. Ponerlo delante de Dios y, arrepentido, proponerte mejorarlo.
¿Por qué dicen que
es feliz? ¿Porque tiene un caballo magnífico y con freno de oro, y posee
numerosa servidumbre y se viste espléndidamente y revienta cada día de comer y
beber?
Pues, juntamente
por eso habría que tenerlo por desgraciado y miserable. Pues no podéis alabarlo
por nada que sea suyo, sino por lo que está fuera de él: por su caballo, por su
freno, por el vestido, cosas que nada tienen que ver con él.
Y dime: ¿qué desgracia mayor puede darse que admirar su caballo, y su freno y
la belleza de su vestido, y la buena complexión de sus criados, y no poder
tributarle a él elogio alguno? ¿Qué pobreza mayor que no tener bien propio
alguno que pueda llevarse de este mundo, sino tener que adornarse con galas
ajenas?
Pues el propio ornato y la propia riqueza no están en nuestros criados y
caballo y vestidos, sino en la belleza del alma, la riqueza de las buenas obras
y la confianza en Dios (CJ - (Cuadernos -
234 - Ricos y pobres en el Nuevo Testamento. Jose I. González Faus).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.