jueves, 28 de marzo de 2024

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

Si Jesús, el Hijo de Dios se ha dignado y rebajado a lavarme los pies por verdadero compromiso de amor, hasta el punto de entregar su Vida por mí, me pregunto: ¿No debo yo hacer lo mismo?

Cada día, Señor, voy descubriendo la grandeza de tu amor, pero sin entenderlo. Mi entendimiento no puede explicarse esa medida infinita de tu Amor Misericordioso, y por mucho que lo intente no cabe en mi limitada cabeza. Dame, Señor la capacidad de, al menos, responderte de la misma manera. Amén.

La gran lección que Jesús nos transmite y nos enseña. No solo de palabra sino también de vida. Se inclina, se agacha, se dobla la espalda y rebaja su condición de maestro para ser siervo y humildemente lavar tus pies, mis pies. Ese es su compromiso que ya había dejado muy claro en su primer mandato: «Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu mente, con todo tu espíritu y con todo tu ser, y al prójimo como a ti mismo»

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.