martes, 18 de junio de 2024

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

Conocemos las dificultades y lo difícil que es para nosotros dar testimonio de nuestra fe. Nuestra soberbia, egoísmo y naturaleza - herida por el pecado - están vencidas de antemano por las seducciones con las que el mundo, demonio y carne nos tientan.

Sí, me duele ponerme en tus manos, Señor, porque al corregirme, renovarme y enderezar mi vida sufro y siento dolor. Me parece más cómodo el camino ancho, fácil y que me permite satisfacer mis caprichos. Pero, sé, Señor, que contigo está mi felicidad.

Y sólo con la asistencia del Espíritu Santo, recibido en la hora de nuestro Bautismo, podemos superar todas esas pruebas y salir victoriosos. De eso, precisamente, se trata: Amar y amar hasta el convencimiento que injertados en el Espíritu Santo podremos hacerlo. Ese es el verdadero camino de perfección que nos propone Jesús. Y en, con y por Él podemos conseguirlo. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.