martes, 6 de agosto de 2024

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

¿Qué nos sucede a nosotros? Esa es la pregunta que podemos hacernos. ¿Por qué no creo? ¿Acaso exijo un visión como la del Tabor? ¿Y creo que teniéndola estaría dispuesto a dar mi vida por Jesús? Recordemos que Pedro, uno de esos tres que estuvo allí presente, le negó tres veces.

Tener una Madre, que no solo es Madre sino que también nos alumbra el camino con su testimonio de obediencia, de fidelidad, de disponibilidad, de entrega y de amor misericordioso, es un gran tesoro que nos ayuda a encontrarnos con su Hijo.

Quizás tú y yo hemos tenido muchos momentos que, como el Tabor, el Señor nos ha tocado y se nos ha insinuado para que nos acerquemos a Él y escuchemos su Palabra. El resultado es que hacemos caso omiso y que alegamos que no nos interesa. Igual, invitado al Tabor te niegas a subir. Quieras o no tu Tabor estará siempre presente y tu oportunidad Dios te la tendrá siempre ofrecida. Un consejo, no la desaproveches ni la pierdas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.