domingo, 26 de enero de 2025

PENSAMIENTOS EN EL SILENCIO DE LA NOCHE

También tú, y yo, y todos, hemos recibido el Espíritu Santo en la hora de nuestro bautismo. No uno parecido, sino el mismo, que recibió Jesús en el Jordán, y concibió en María la encarnación del Hijo. Y en Él, por su acción, estamos llamados a proclamar la Buena Noticia.

Madre, dame la fortaleza, humildad, paciencia y, sobre todo la fe, que tú tuviste y sostuviste en el camino, hasta llegar al pie de la Cruz donde viste crucificar a tu Hijo y compartiste su dolor y sacrificio. En tus manos pongo mi vida y confío que asido a ti pueda también llegar al pie de la Cruz junto a tu Hijo.

Ahora, no por eso podemos y debemos hacer lo mismo. Hay diversidad de carismas – 1ª Corintios 12, 4 – y cada cual, según los carismas recibido, deberá esforzarse en dar a conocer esa Buena Noticia. Sin imposiciones, ni aspavientos, sino con humildad, sencillez y poniendo su vida al servicio de los más necesitados con amor y misericordia y en manos del Espíritu Santo.

Todo lo que viene de este mundo y se goza en este mundo es cosa que también desaparece con este mundo. Por lo tanto, lo verdaderamente inteligente es vivir y hacer cosas que valgan para el otro mundo, porque ese será eterno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.