No cabe duda, aunque muchos aferrados a la ley no lo
entiendan, que la fe y la misericordia están por encima. Nos contradecimos
cuando honramos a quienes la cumplen inflexiblemente.
No busque tu bienestar en el mundo, porque por mucho
que logres siempre será temporal, limitado y terminarás vacío. La vida tiene
una sola finalidad: el encuentro con Dios, donde tienes tu plena felicidad.
Premiamos a quienes impiden que la fuerza del Espíritu actúe libremente, olvidando que Dios no se deja encerrar en reglamentos y que el amor es el verdadero cumplimiento de la ley.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu pensamiento es una búsqueda más, y puede ayudarnos a encontrarnos y a encontrar nuestro verdadero camino.